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Los abusos y la nueva Constitución

A fines de 2019, para sofocar el estallido social que amenazaba con incendiar Chile, los políticos acordaron cambiar la Constitución. El diagnóstico fue — según parece, porque nunca se ha explicitado — que la Carta Fundamental vigente, elaborada por el dictador Pinochet, era la principal responsable del explosivo fenómeno, de manera que bastaba con cambiarla por otra de origen democrático para que el país volviera a convertirse en lo que fue durante tantos años: una tranquila taza de leche. Nadie explicó, sin embargo, cómo pudo ocurrir que un cuerpo legal del que la inmensa mayoría de los ciudadanos no había leído ni tan siquiera una línea provocara semejante descontento popular. T odo indica, entonces, que la Constitución vigente fue el chivo expiatorio. Había que buscar una vía para salir del trance y esa era la que estaba más a mano. Tal constatación deja dos interrogantes por resolver: ¿cuáles fueron las reales causas del estallido social de 2019? Y, tanto o más importante,

Carta pública al Presidente Gabriel Boric

  CARTA PÚBLICA AL PRESIDENTE GABRIEL BORIC: ¿POR QUÉ, SI SE COMPROMETIÓ A COMBATIR LOS ABUSOS DURANTE SU MANDATO, DECIDIÓ MANTENER EL PEOR DE TODOS LOS QUE SE COMETEN CONTRA LOS AFILIADOS A LAS AFP?   Respetado Presidente: Uno de los principales mensajes que nos trasmitió en su primer discurso presidencial, y también en actos y entrevistas posteriores, fue que usted y su gobierno lucharían contra la injusticia, la discriminación, las violaciones a los derechos humanos y la enorme desigualdad económica y social que nos afecta como país; que, en definitiva, combatirían los abusos . Este es, además, uno de los compromisos más significativos que usted asumió con todos nosotros, sus compatriotas, durante su campaña. El abuso , entendido como el uso del poder para obtener beneficios personales a costa de perjudicar a otros, es un flagelo inaceptable en toda sociedad, pese a lo cual no está prohibido de manera genérica en la normativa chilena . No solo eso: el derecho de no ser abus

La respuesta de la presidenta de las AFP a mi columna: cuando quien comete los abusos se encarga de confirmarlos

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En su respuesta a mi columna La gran farra previsional de Gabriel Boric — donde expuse que el sistema previsional chileno es un compendio de feroces abusos que se perpetran en contra de los afiliados a vista y paciencia de las instituciones encargadas de proteger sus derechos (incluyendo entre estas a todos los parlamentarios y autoridades que están en contra del cuarto retiro) — , la presidenta de las AFP, la señora Alejandra Cox, señaló que ella contiene «una serie de imprecisiones y confusiones, además de algunos errores». Para su desazón, no obstante, la señora Cox está demasiado equivocada. Permítame comprobárselo exponiéndole primero cuáles son los abusos que denuncié en mi columna, y evidenciando luego, sin asomo de dudas y de una forma fácil de entender, las falacias y los serios errores de que adolecen sus supuestas aclaraciones. Los abusos previsionales que denuncié en mi columna Denuncié que:    1.        Los afiliados estamos obligados a pagarles a las AFP comisiones de

La gran farra previsional de Gabriel Boric

  Cómo dilapidar una oportunidad histórica para, junto con mejorar las pensiones de manera sustancial, construir un Chile más equitativo Gabriel Boric parece ser el más probable ganador de la elección presidencial. Por ello, es del máximo interés analizar a fondo su programa de gobierno, en especial en aquellas materias que, por esas cosas de la vida, uno conoce más a fondo. Es el caso de la previsión, donde la propuesta del candidato es una farra garrafal, ya que dilapida la posibilidad irrepetible de asestar un golpe mortal a la concentración económica y a la brutal desigualdad imperante. ¿Cómo? Manteniendo el sistema actual, pero eliminando de raíz los brutales abusos y despojos que se cometen contra los afiliados por su intermedio. En particular tres de ellos. ¿De qué manera? Lo explico a continuación: Primer despojo por corregir: los montos de las comisiones de administración Durante 2020, las AFP cobraron a sus afiliados 1,2  billones de pesos en comisiones de admin

Chile, un país abusado

  El abuso, entendido como el uso del poder para obtener beneficios personales a costa de perjudicar a otros, no está prohibido de manera genérica en la normativa chilena. No solo eso: el derecho de no ser abusado, con su correspondiente garantía fundamental, tampoco figura en el artículo 19 de la Constitución vigente (iba a escribir nuestra Constitución , pero me percaté de que nunca ha sido nuestra ). En ella, de hecho, solo se menciona la palabra abuso dos veces: para referirse a los eventuales que pudieren cometerse en el ejercicio de la libertad de expresión, y como una de las posibles razones (abuso de poder) que puede invocar la Cámara de Diputados para respaldar una acusación constitucional ante el Senado. Respecto de la otra infinita variedad de abusos que existe, ni una sola palabra. Nada de nada. No es casualidad, entonces, que durante los últimos 50 años los abusos se hayan enquistado en cada recoveco de nuestras instituciones y que, a la fecha, exista una lista intermi